19/2/20

Prueba: Seat Leon 1.5 EcoTSI 150 Xcellence 5p

Hoy, la prueba de un modelo que está muy próximo a desaparecer, ya que hace apenas unas semanas que se presentó su sustituto: el Seat León, en este caso con el motor 1.5 de gasolina de 150 CV con sistema ACT de desconexión de cilindros y acabado Xcellence.


Por fuera
Qué decir que no se haya dicho ya de un coche que lleva ya 8 años con nosotros... pues que, sorprendentemente, sigue igual de vigente que cuando salió, ya que su línea se sigue viendo moderna y actual. Sí, lo de ser el modelo más vendido en España le pasa factura ya que está muy visto (es fácil que te cruces con varios iguales en el mismo día), pero sigue siendo un modelo agradable.


Si recuerdas, hace algo más de año y medio probamos este mismo modelo pero en versión FR y con motor diésel, así que la opinión general tanto de diseño exterior como de los interiores es prácticamente idéntica. Los cambios en esta versión Xcellence (con orientación lujosa, en lugar de la orientación deportiva de los FR) son de detalle, correspondiendo a paragolpes (tanto delanteros como traseros), así como la zona de los antinieblas y, por supuesto, las llantas (gustándome mucho estas del Xcellence). Lo que sí se nota también es que en la unidad probada no llevábamos los faros led, siendo halógenos (y de iluminación bastante pobre, por cierto), solamente llevando un pequeño triángulo led para la iluminación diurna.


Por dentro
Aquí los cambios con respecto al FR ya probado son meramente decorativos: las zonas en negro piano se han sustituido por un plástico plateado que queda muy bien, se ensucia menos y produce menos reflejos. El volante es redondo e incorpora una X en su parte central inferior para referirse a este acabado Xcellence. Los asientos son los mismos con otra tapicería, resultando bastante cómodos a la vez que agarran bien el cuerpo. La ergonomía es perfecta, estando todos los botones y mandos justo allí donde se espera que estén.


Con buen criterio se mantienen bastantes botones físicos, como los del climatizador, y algunos para la utlización del sistema multimedia. Este sistema funciona muy bien, respondiendo la pantalla siempre a la primera y disponiendo de unos menús claros y bastante intuitivos, similares a los de un smartphone. Todos los botones y ruletas tienen buen tacto (muchos son compartidos con otros modelos del grupo VAG), y la parte superior del salpicadero está forrada de un plástico blando muy agradable (las puertas son de otro material más rígido, aunque tienen una luz ambiental configurable que queda muy bien); además todo está bien ajustado y no se aprecia ni un solo grillo en marcha.


Desde el asiento del conductor la visibilidad es buena en todas direcciones, y la postura de conducción es excelente (además de la ya comentada buena ergonomía). La ya comentada luz ambiental (configurable entre varios colores) hace un efecto muy agradable por la noche. En las plazas traseras hay espacio más que de sobra para dos adultos bastante grandecitos (tres van estrechos en cualquier compacto), y el maletero está en la media del segmento, disponiendo de unas formas bastante cúbicas y bien aprovechables, además de un suelo que se puede colocar en dos alturas y que resulta muy práctico.


En marcha
Primero hablaremos de la mayor diferencia de este modelo con respecto al que ya probamos: el motor. En este caso disponemos de un motor de gasolina de 1.5 litros, 150 CV y sistema ACT de desconexión de cilindros (en determinadas circunstancias, el motor desconecta dos de los cuatro cilindros y funciona en modo bicilíndrico, informando de ello en la pantalla central de la instrumentación), todo ello asociado a un cambio manual de 6 velocidades.


De este motor sólo puedo decir cosas buenas: el empuje es muy bueno en cualquier marcha (a más de 1700 revoluciones, claro), y si ya reducimos para hacer un adelantamiento saldrá como una bala, apareciendo ahí sus 150 CV. Pero si vamos llaneando o en ligera cuesta abajo, y sin pedir mucho al acelerador, entrará en funcionamiento la desconexión de cilindros y eso nos ayudará a ahorrar algo en el consumo; este cambio es prácticamente inapreciable, solamente cambiando muy ligeramente el sonido (con la radio puesta ni nos daremos cuenta, ya que sólo cambia el tono a algo más grave) pero sin notar ningún cambio ni ninguna vibración, y volviendo a activar los otros dos cilindros en cuanto son requeridos.


Y sí, se nota en el consumo: en los casi 1000 km recorridos (casi todos por autopista y carretera nacional), hemos obtenido una media de 6,14 litros por cada 100 km, un dato muy bueno teniendo en cuenta su potencia y su buen nivel de prestaciones.


Del comportamiento tampoco se puede decir nada malo, ya que es un coche con un buen bastidor y un comportamiento muy noble, que va por donde le dices y con unos límites altos que dan mucha seguridad. En esta ocasión no pudimos probarlo por carretera de montaña, pero no creemos que difiera mucho de la otra versión FR probada y que también era excelente en esos tipos de carreteras. Sí que debemos mencionar nuevamente los faros, que alumbran poco (recomendamos adquirir los faros led), y que los retrovisores exteriores son pequeños y obligan a colocarlos muy hacia afuera si no queremos tener mucho ángulo muerto (con los consiguientes sustos).


Equipamiento y precio
Ahora mismo esta versión está ya descatalogada, ya que ante la llegada del nuevo solamente se puede pedir a fábrica la versión "FR Fast Edition" tanto con este motor 1.5 EcoTSI de 150 CV, como en 2.0 TDI también de 150 CV, o en versión GNC del 1.5 130 CV. Por tanto, si quieres uno igual deberás buscar alguna unidad en stock o un km0. El precio de tarifa hace unos meses era de unos 25000 euros, que seguro que en concesionario serán bastantes menos... y es que la aparición de su sustituto hace que haya buenas ofertas.

La versión probada Xcellence lleva ya buen equipamiento, con las llantas de aleación de 17 pulgadas, el climatizador automático bizona, la pantalla multimedia de 8 pulgadas con Android Auto y Apple CarPlay, sistema Start/Stop, acceso y arranque manos libres, sensores de lluvia y luces, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, luces largas automáticas o diversos sistemas de ayuda a la conducción como mantenimiento de carril o advertencia de colisión frontal (que es bastante más permisivo que los de otras marcas, ¿será que está puesto a punto en España, país en el que dejamos más bien poca distancia de seguridad?).


Conclusión
Es el segundo León que pruebo, y me ha gustado tanto como el primero. El motor TDI es excelente, pero este TSI con desconexión de cilindros es "una virguería tecnológica" y con un consumo más que razonable. Es confortable, con buenas prestaciones, con buen precio y con una línea agradable. ¿El problema? Que está muy visto... y que ya se ha presentado su sustituto (con una amplia mejora tecnológica aunque no tanto estética); pero si eso no te importa te llevarás un gran coche a muy buen precio gracias a los descuentos ante la llegada del nuevo.

  • Destacable: prestaciones y consumos, agrado general.
  • Mejorable: diseño muy visto, retrovisores pequeños, faros halógenos mejorables.

El resto de las fotos, aquí.



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