Prueba: Fiat 500C 1.0 Hybrid Dolcevita

Hoy te traemos la prueba del urbano más vendido en Europa a pesar de sus años: el Fiat 500, en su versión microhíbrida y carrocería descapotable (llamada 500C).

Por fuera

Qué decir de este modelo que no se haya dicho ya. Y es que lleva 15 años a la venta (¡sí, 15 años, salió en 2007!) apenas con un ligero restyling. Su éxito sigue siendo tal que incluso durante varios meses consigue colarse en el top 10 de ventas europeo, y su sustituto (que solamente está disponible en versión eléctrica) no lo sustituye realmente ya que ambos se venden simultáneamente. Así que si sigue siendo un éxito después de tanto tiempo será por algo, ¿no?

Y es que las fotos hablan por sí solas. Es un modelo que fue muy bien pensado y eso se nota, con una estética agradable que gusta a todo el mundo. Este color llamado "Verde Rugiada" resulta también muy agradable y algo menos visto que el típico blanco.

Los faros redondos le otorgan una mirada simpática, las llantas de aleación de 15 pulgadas quedan muy bien y los pilotos finos se ven actuales. La capota en color negro combina muy bien con el color de la carrocería y hace un contraste muy interesante.

Por dentro

Los ligeros cambios que ha ido sufriendo este modelo durante su vida comercial hacen que se siga viendo plenamente actual. El salpicadero con esa plancha en color carrocería le da un aire desenfadado, y la tapicería a juego con la capota queda muy bien. La pantalla central de 7 pulgadas se maneja de forma bastante fácil y el resto de mandos queda muy a mano (aunque ya quedan pocos coches que tengan los elevalunas en el centro). La instrumentación es muy original aunque el velocímetro se queda pequeño, y tiene unos botones justo al lado que son difíciles de manejar en marcha. Los materiales están por encima de la media del segmento y los ajustes son muy buenos (aunque en esta unidad había un ruido en el pilar A que no supimos identificar, y además la memoria USB a veces no quería cargar y no cargaba hasta que no quitábamos el contacto y lo volvíamos a dar).

La postura al volante es un poco extraña. Vale que el coche es pequeño, pero la regulación en altura del asiento es muy mejorable ya que sólo afecta a la banqueta y no al asiento en sí; además el volante no se regula en profundidad y eso hace que según nuestra estatura tengamos que llevar una posición algo forzada. Te acostumbras rápido, pero al principio se hace un poco extraño. Al menos los asientos son cómodos y recogen aceptablemente bien.

Delante no hay ningún problema para dos pasajeros. Detrás ya es otra historia, porque además de ser un 3 puertas, por lo que toca doblarse mucho para acceder a los asientos traseros, el espacio es el que es; no es muy pequeño pero tampoco sobra (además, la batería del sistema microhíbrido va bajo el asiento del conductor, lo que hace que el pasajero trasero no pueda apoyar ahí los pies). El gran perjudicado es el maletero, que además en esta versión cabrio tiene una tapa muy pequeña para acceder y que hace complicado cargar según qué cosas. Al menos los asientos traseros pueden ser abatibles (en opción) y eso ayuda a ampliar el espacio de carga.

En marcha

Ya es el segundo 500 descapotable que probamos, por lo que la forma de moverse no nos resulta novedosa. La suspensión está bien puesta a punto ya que tiene el punto justo de dureza en carretera pero en ciudad resulta cómoda, filtrando bien los baches y esas habituales trampas ciudadanas (guardias tumbados, tapas de alcantarilla...). La dirección es muy suave (demasiado quizá), incluyendo el modo "city" para aparcar con un dedo; lástima que sea poco directa y haya que girar mucho el volante.

Lo que sí es nuevo es el motor, y es que el vetusto 1.2 ha dejado paso a un nuevo motor de 1 litro de cilindrada y microhibridado (de ahí el "Hybrid" del nombre y su pegatina Eco de la DGT, aunque no sea un híbrido de verdad). Sus 70 CV de potencia cunden mucho y es que sus 6 marchas ayudan a sacarle todo el jugo, con unos desarrollos muy bien seleccionados. A pesar de ser tricilíndrico no se perciben las típicas vibraciones de estos motores, estando muy bien aislado. Y su sonido es muy agradable, incluso al estirar las marchas suena bien. Y el consumo ha bajado bastante, ya que hemos obtenido una media de 5,1 litros cada 100 km combinando todo tipo de carreteras (sin puertos de montaña esta vez).

Equipamiento y precio

Actualmente esta versión ha sufrido una mejora de equipamiento y no se corresponde exactamente con la unidad probada (el probado no lleva climatizador ni navegador, entre otros elementos).

Según configurador, esta versión cuesta 18817 euros (con descuento de financiación incluido). Su equipamiento incluye navegador con pantalla de 7 pulgadas, radio digital y 6 altavoces, instrumentación digital, climatizador automático, sensor de aparcamiento trasero, llantas de aleación de 16 pulgadas, control de crucero con limitador, volante de piel con mandos, faros antiniebla, asiento trasero abatible o sensores de lluvia y luces. Además, tienes diferentes opciones de color para la capota y el volante y la zona de los mandos del salpicadero.

Poquitas opciones en esta versión tope de gama, salvo la pintura (450 €, el color gratuito es el "Naranja Sicilia"), el "Moppar connect services" (330 €) o el "pack d-fence" (295 €), además de una buena colección de pegatinas para el exterior, llantas de distintos diseños o incluso fundas para la llave.

Conclusión

Llevo tantos años enamorado de este coche que no sé por qué no me he comprado todavía uno... Y es que pienso lo mismo que cuando lo probé hace 4 años: sigue siendo plenamente actual, su estética es preciosa y la carrocería descapotable no tiene igual en el mercado. De acuerdo, si usas mucho las plazas traseras no es el mejor urbano y te vendrá mejor un 5 puertas, pero todo eso se te olvida cuando le das al botón y abres el techo. Para pasear por la ciudad o por la playa no necesitas más de sus 70 CV... ¡y además gasta poco!

• Destacable: estética, personalización, consumo contenido, carrocería descapotable.
  
• Mejorable: acceso a plazas traseras, volante no regulable en profundidad.
  

El resto de las fotos, aquí.